Cómo se llama el verde que no le gusta la Navidad

Llegó la temporada mucho más alegre y colorida del año: ¡Navidad! y con ella los colores como el verde, colorado, blanco, plateado, azul marino, dorado y amarillo que la representan. ¡Pero espera un minuto! ¿Sabes por qué razón estos son los colores mucho más usados y representativos para esta temporada del año? Ya que bien, el día de hoy te hablaremos de la teoría de los colores navideños.

Antes de iniciar, debemos recordar la definición de la palabra color: tiene relación a la sensación que percibimos del reflejo de la luz sobre un elemento. En este orden de ideas, la teoría del color busca estandarizar el saber sobre estos colores para su app práctica en el diseño gráfico y promocional.

Ermitaño

La historia donde apareció por vez primera lleva por nombre ¡De qué forma el Grinch robó la Navidad!, publicada inicialmente en inglés. Seuss Geisel la escribió en verso, como muchas otras proyectos de sus hijos. Él mismo ilustró la obra. Su imagen, según cuenta la historia, tiene pelo verde, ojos amarillos y vive en una gruta cerca de la cima del monte Crumpit, de prácticamente mil pies de altura, situada al norte de Villa Who. Es vecino de los Quién, seres muy cariñosos. La única compañía de Grumpy es Max, su perro, y le agrada comer cebollas. Desde su fría casa, orquesta de qué forma silenciar al alegre Quién, que se prepara con ansias para la Navidad. Es el alboroto de las Vísperas de sus vecinos lo que le irrita.

¿Cuál es su diabólico plan? Al llevarse todos y cada uno de los adornos, regalos y platos que los Quién emplearían para festejar. Pero el Grinch se llama la atención al comprender que la multitud de Whoville festejó del mismo modo, más allá de que birlaron todos y cada uno de los recursos para la celebración. Esto le enseña una importante lección al personaje principal, lo marca tanto que en el final de la historia su corazón medra, al paso que al comienzo de la historia era «2 tallas mucho más pequeño» en comparación con el resto.

¡Vaya Papá Noel!

Scott Calvin es el padre divorciado de Charlie y está enojado pues su madre y su novio le afirmaron que Santa Claus no existe. En el momento en que el niño visita a su padre el día de Navidad, escuchan un estruendos en el techo, el padre sube y se encara al entrometido que está en el techo y acaba cayendo por el borde.

Resulta que el entrometido ejecutado de manera accidental es Santa Claus y en este momento Scott debe tomar su rincón. De a poco, Scott empieza a conseguir el físico y el accionar de Papá Noel…

Navidad minimalista

Esta inclinación procede de los países norteños y escandinavos. La técnica que usan para la decoración es que «menos es mucho más». Los árboles de Navidad se sostienen en su estado natural, sin adornos de colores. Una paleta de colores en tonos verdes, bastante blanco, mínimos datos dorados y materiales de fibras naturales. Lo que se busca es conseguir un efecto de cohesión en el momento en que se aprecia todo el espacio como un todo y ningún producto llama mucho más la atención que otro.

Pero, ¿todos disponemos el espíritu navideño que lúcida el sonido de una pandereta y luces de colores intermitentes?

No todos. En una gruta en lo prominente de una montaña, 900 yardas al norte de Whoville, vive una criatura pilosa y gruñona con un corazón «2 tamaños bastante pequeño» llamada The Grinch, cuyo único propósito es hurtar la Navidad. Suprime los adornos navideños y los regalos a los Who e impide que llegue la Navidad.

Naturalmente, Los Grinches es un proyecto literario fruto de la imaginación del Dr. Seuss (Theodor Seuss Geisel) en 1957. Un ser que ha atravesado el cosmos literario y llegado al cine en múltiples oportunidades, la última de ellas en esta pre-navidad. ¿Asimismo cruzó la pantalla para instalarse entre nosotros?

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