La Revolución Neolítica vio la primera transformación extremista de la manera de vida de la raza humana, pasando de una economía nómada a una sedentaria y de una economía de concentración (caza, pesca y recolección) a una productiva (agricultura y ganadería). El avance de la agricultura y la ganadería dejó el avance de los primeros núcleos de población equilibrados y la construcción de construcciones que permitieron la vida comunal. Esta revolución agrícola implica, aparte de la “domesticación” de todo el mundo vegetal y animal, la manipulación de las especies para hacerlas capaces para el consumo humano. En verdad, las frutas y verduras que adquirimos en la tienda de comibles o en el autoservicio se semejan poco a eso que cultivaban nuestros ancestros hace una cantidad enorme de años.
Por poner un ejemplo, el banano silvestre se cultivó por vez primera hace 7000 años en Papua Novedosa Guinea y contenía semillas enormes y duras dentro suyo y era considerablemente más verde que hoy en dia. Hasta hoy, los plátanos fueron editados genéticamente y el resultado es una fruta con semillas sutiles, mejor gusto, mucho más nutrientes y un color considerablemente más impresionante.
El tomate, la fruta mucho más consumida del mundo
Sí, el tomate es una fruta y es la fruta mucho más habitual y consumida de todo el mundo.
Hoy en día, se consumen anualmente cerca de 170 millones de toneladas de tomates.
Quizás en este momento varios estén pensando, pero ¿verdaderamente el tomate es una fruta? La contestación es sí. El fruto es la una parte de la planta que tiene dentro las semillas, con lo que botánicamente, un tomate es un fruto.
La llegada de los jugos a España
En España, el impulso de la industria de los derivados vegetales se da entre 1890 y la Primera Guerra Mundial, si bien los principios de la actividad elaboradora ahora se registran en el siglo XIX. siglo. La demanda interna era muy pobre, con bajo poder de compra, pero la demanda externa era el motor que tiraba de la industria alimenticia.
La industria de los jugos en este país era en su origen una sección pequeñísima de la industria de las conservas vegetales y tiene su origen directo en las factorías de pulpa de frutas y la utilización de aceites fundamentales y pieles de cítricos que se establecieron en Murcia y Valencia en finales del siglo XIX y principios del XX, que empleaba la cocción al vapor y el envasado.