Si hay muchos fallos es que nos encontramos equivocados en el tema. Luis Arroyo Pérez, directivo de la Escuela de Etiqueta, nos asistió a detectar las primordiales y extraerlas de su libro «La mesa está servidada». Las reglas están prácticamente en desuso pues se dejaron de educar en el hogar y en las academias, pero a los jóvenes les atrae bastante rememorar ese conocimiento.
¿Qué realizar entonces?
Existen varios hábitos que se tienen la posibilidad de mudar de manera realmente simple. Merece la pena, pues tener compañía real y estar presente asiste para hilar y hacer mas fuerte nudos de amor, amistad, compañerismo y fraternidad:
- Deja tu celular en el bolsillo o bolso (y en modo discreto) en el momento en que andas con otra gente con el propósito de socializar. Ocúpese de su asamblea y guarde todo lo demás para después. Muestre a otra gente que estar con ellos es esencial para usted y que van a tener su compañía y atención mientras que estén juntos.
- Impide cualquier ocasión de perder la atención. Por servirnos de un ejemplo, soliciar el menú físico en sitios de comidas y establecimientos en vez de consultarlo por medio de un código QR. En el caso de que no haya carta física, es suficiente con emplear el móvil inteligente para efectuar el pedido y guardarlo rápidamente. No tomes fotografías de la comida.
- No pierdas la posibilidad de realizar amigos a lo largo de los reposos de clase, charlas, asambleas, etcétera.
para pegar al móvil inteligente. Esos instantes son los mucho más esenciales para conectar con novedosas personas que seguro tienen bastante en común contigo. Las relaciones humanas se edifican en el medio. - Revela que tienes alguna educación participando en sesiones de yoga, saunas, masajes y afines sin celular. Si andas en un concierto, cine, sala o charla, almacena el dispositivo (con el volumen antes silenciado). El resplandor de la pantalla y los sonidos de notificación incordian a el resto y arruinan el instante para todos.
- Generalmente, dale toda la relevancia y atención al instante presente ahora la gente presentes.
Aguardar a que todo esté servido
Es de mala educación comenzar a comer en el momento en que el resto de la mesa aún no está servida, hay que aguardar a que todos y cada uno de los comensales hayan terminado su plato para comenzar a comer. Esto debe hacerse para todos y cada uno de los platos que conforman el menú, no solo para el primer plato.
En las comidas formales se acostumbran a poner múltiples vasos a la derecha del plato. Es esencial no confundir el propósito de las copas, con lo que has de saber la localización, que tiende a ser de menor a mayor. La primera copa comenzando por la derecha es para los vinos blancos, le prosigue la que se emplea para el vino tinto y finalmente la copa para el agua. Frecuenta haber una cuarta parte de copa entre el agua y el vino tinto con una manera mucho más alargada que se usa para el champán o el vino espumoso.
Si decir ganancias es de mala educación, ¿qué afirmas?
Lo destacado que se puede decir a quienes distribuyen mesa con nosotros oa las que observamos comiendo es: ¡disfrutad de la comida! o ¡buen beneficio!
Es preferible decir esto antes de comenzar a comer, pues no es de «buen gusto» que la multitud se vea obligada a contestar con la boca llena de comida.