- Supresión de restos gruesos: En la primera etapa se suprimen todos y cada uno de los restos perceptibles a fácil vista, lo que comunmente se debe realizar con papel desechable y un fuerte chorro de agua.
- Lavado con limpiadores: Se usan los llamados lavaplatos, que poseen substancias que tienen la posibilidad de remover la mugre y la grasa engastada. Esta segunda etapa está desarrollada para sostener el utensilio con un aspecto limpio, pero no suprime completamente las bacterias y hongos que logren haberse asentado en la área, con lo que la etapa de desinfección es primordial para llenar el desarrollo.
- Desinfección: Esta etapa tiene como propósito la supresión completa de los gérmenes y se puede efectuar de distintas formas. Las elevadas temperaturas, la radiación UV y algunas substancias químicas llamadas biocidas suprimen la existencia de microorganismos. Por esta razón, se acostumbran a emplear electrodomésticos que usan agua a una temperatura mayor a los 65 °C o esterilizadores de cuchillos que los dan a conocer a la radiación de una lámpara UV. Del mismo modo, la lejía se emplea para desinfectar los utensilios. La lejía no es mucho más que una solución de hipoclorito de sodio, un biocida muy efectivo contra las bacterias.
Es esencial tener en consideración que para desinfectar materiales en contacto con alimentos, el blanqueador ha de ser capaz para alimentos. La existencia de cloro y otros agentes químicos tanto en el agua de saneamiento como en el agua bebible es un aspecto a tomar en consideración en la vivienda.
¿Qué sucede si no proseguimos estas fases?
esponja en frente de cepillo
Los estudiosos recolectaron esponjas de cocina de 20 habitantes de Portugal y 35 cepillos y 14 esponjas de habitantes de Noruega.
Una encuesta previo de 9966 personas efectuada por el aparato de investigación halló que las esponjas se emplean generalmente para adecentar la cocina en la mayor parte de los diez países de europa, al paso que los cepillos son el utensilio de limpieza dominante en solo 2 países: Noruega y Dinamarca.
¿Exactamente en qué orden se tienen que lavar los platos?
(Fotografía: Getty Images)
Lo que tienes que lavar primeramente son los vasos, copas y tazas, puesto que son los utensilios que menos se manchan, lo que impide que la esponja de tu cinturilla tenga menos grasa y un fragancia desapacible.
Siempre y en todo momento enjuague con agua fría
Es común lavar los platos con agua fría del fregadero. No obstante, este es un fallo que transforma a tu cocina en un caldo de cultivo para bacterias y patógenos.
En este sentido, el Portal de Seguridad Alimenticia del gobierno de los USA advierte que lavar las tablas de recortar, los platos, los utensilios y las encimeras con agua ardiente y jabón es primordial para eludir la polución cruzada.